El hotel está situado a tan sólo 10 Km. del Parque Nacional de Timanfaya, conocido como "Montañas del Fuego" debido a su origen volcánico. Los rocosos paisajes de Lanzarote sorprenden el visitante por su exuberante belleza y convierten su visita en un recuerdo inolvidable.
La construcción se inspira en los pueblos típicos del sur de Lanzarote. La entrada se realiza a través de una iglesia, que es una copia de Nuestra Señora de Guadalupe de Teguisse. Bajo la bóveda del volcán se ubican la recepción, los salones, los bares y las tiendas, entre cascadas y balcones con vegetación. Las habitaciones se reparten entre 20 casas típicas y todas disfrutan de amplitud y luminosidad, además de un completo equipamiento. Desde ellas se pueden contemplar las islas vecinas de Fuerteventura y Lobos.
A sus pies, se halla el puerto deportivo Marina Rubicón, donde los huéspedes del hotel y aficionados a los deportes, puedan disfrutar de una gran selección de actividades náuticas.